sábado, 24 de octubre de 2009

Estilos cognitivos

                            

Son patrones diferenciados en el proceso perceptivo y cognitivo (a veces estrategias características) que el sujeto desarrolla en la realización de acciones y ejecución de tareas
Es muy importante la ausencia de asociación entre estilo cognitivo e inteligencia, ya que, es esta ausencia de relación, la que justifica la existencia de los estilos; es decir, el cociente intelectual no correlaciona con uno u otro estilo cognitivo. Lo que los estilos cognitivos explican son las diferencias individuales en la actuación de los procesos cognitivos y por ello son un componente de la personalidad.
Sin embargo, Sternberg y Grigorenko (1997), piensan que no se trata de una característica de la personalidad, sino que ha de ser abordado como procesamiento humano de la información, pues se refiere a las predisposiciones consistentes y características de percibir, recordar, organizar, procesar, pensar y resolver problemas (no se trata de habilidades, sino de la manera preferida como uno usa sus habilidades)
El término fue introducido por Gordon Allport (Indiana, 1897-1967) en los años 30.
El estilo cognitivo mejor estudiado, tal vez sea el de articulación de campo (dependencia/independencia de campo). Otros estilos cognitivos son diferenciación conceptual, impulsividad/reflexividad, visualizador/verbalizador, visual/háptico, estilo conceptual, locus de control interno/externo…
Articulación de campo
Es uno de los estilos más y mejor estudiados desde que fuera descubierto en los años 40 por H. Witkin y Solomon Asch. Estos autores estudiaban la orientación en los pilotos de aviación y encontraron que algunos necesitaban tomar como referencia el suelo para saber si se encontraban nivelados respecto de él; otros no necesitaban tal referencia. Así, sugirieron que las personas se pueden clasificar según el grado en que son dependientes de la estructura del campo visual que las rodea.
El modelo dependencia-independencia de campo desarrollado por Witkin, considera la posibilidad de conocer el estilo cognitivo de los participantes a partir de la percepción de una figura enmarcada en un campo (por ejemplo un marco). La percepción de la figura puede ser en función, o no, del campo. Los instrumentos de medición más conocidos sobre este modelo son el EFT y el GEFT.
Para desarrollar estas pruebas se comenzó planteando situaciones en las que se pudieran separar los estímulos visuales y los vestibulares. En la primera experiencia se inclinó el campo de referencia visual sin modificar la influencia gravitacional para lo que se crearon el test del marco y la varilla (RFT: Rod and Frame Test) y el test de ajuste corporal (BAT: Body Adjustment Test).
RFT (TEST DE LA BARRA Y DEL MARCO)
Se le sienta al sujeto en una habitación oscura y se le muestra un marco iluminado provisto de una barra giratoria, barra que se puede inclinar independientemente del marco. La tarea del sujeto consiste en llevar a la vertical la barra que previamente estaba inclinada, mientras se mantiene el marco en posición inclinada. Los sujetos que realizan esta tarea se diferencian entre los que buscan la vertical tomando como referencia los estímulos provenientes del campo visual, y los que buscan la vertical tomando como referencia sus sensaciones cinestésicas y gravitatorias.
BAT (TEST DE AJUSTE CORPORAL)
Se le hace sentar al sujeto en una silla situada en una habitación que se puede inclinar hacia la derecha y hacia la izquierda. La silla también se puede inclinar, independientemente de la inclinación de la habitación. Se le sienta al sujeto en la silla previamente inclinada, silla que se encuentra en la habitación que también está inclinada, y se le pide que encuentre la vertical. Hay sujetos que ante esta orden hacen caso omiso de las sensaciones corporales y enderezan su silla tomando como referencia la habitación inclinada tal como aparece en el campo visual. Otros sujetos, sin embargo, utilizan la sensación corporal de gravedad como punto de referencia principal de percepción de la verticalidad.
En la segunda situación, se alteró la dirección de la fuerza de gravedad, introduciendo una fuerza centrífuga, mientras el marco visual de referencia permanecía vertical. Este es el caso de test de la habitación rotatoria (RRT: Rotating Room Test). Constatado el hecho de que los mismos sujetos respondían a diferentes situaciones priorizando siempre el mismo tipo de información, visual o vestibular, se les denominó, a los primeros como “dependientes de campo” (de campo visual) y a los segundos, por contraposición, “independientes de campo”.
RRT (TEST DE LA HABITACIÓN GIRATORIA)Se trata de una habitación giratoria en la que se sitúa una silla que se puede inclinar a derecha o a izquierda. Se sienta al sujeto en una silla inclinada y se hace que gire la habitación en su carril circular. Se le pide al sujeto que busque la vertical. Ante esta tarea se diferencian los sujetos que enderezan el cuerpo según la habitación vertical que observan en su campo visual de aquellos sujetos que buscan la vertical según las fuerzas alteradas (fuerza de la gravedad que actúa desde dentro y fuerza centrífuga que actúa desde el exterior) que actúan sobre su cuerpo.
Las indagaciones posteriores intentaron explicar las consistencias encontradas considerando la posibilidad de que las dos tareas de percepción de la verticalidad la clave fuera la separación de un elemento (la varilla o el cuerpo) del campo organizado, o marco. Esta posibilidad se estudió a través del examen de tareas que requerían que el sujeto desenmascarara un elemento puntual de un campo organizado del que formaba parte. Los resultados mostraron que, comparados con los independientes de campo, los sujetos dependientes de campo (en el RFT, el BAT y el RRT) tenían mayores dificultades a la hora de desenmascarar figuras en contextos complejos, como es el tipo de tareas que presenta el test de figuras enmascaradas (EFT: Embedded Figures Test)
EFT (TEST DE FIGURAS ENMASCARADAS)Las diferencias constatadas en la percepción de la verticalidad se muestran también en otros ámbitos. Así, en el EFT se le presentan al sujeto dos figuras: una simple y otra compleja, y se le dice que busque la primera en la segunda. Los sujetos que en esta tarea encuentran dificultades para identificar la figura simple dentro de la compleja son las mismas que en los tests anteriores han encontrado dificultades para desentenderse de los estímulos distorsionadores externos: son los sujetos Dependientes de Campo. En la resolución de los problemas que requieren diferenciar una determinada parte extrayéndola del contexto global, los Dependientes de campo encuentran dificultades para separar esos elementos del contexto original y resituarlos en un contexto nuevo.
Posteriormente se estudiaron dos temas principales relacionados con la dependencia- independencia de campo:
1. La amplitud de la aptitud para desenmascarar, específicamente la relación entre esta aptitud en la percepción y en el funcionamiento intelectual en general
2. La relación entre la aptitud para desenmascarar y la aptitud para estructurar y reestructurar.
En relación con el primer tema, los sujetos dependientes de campo en percepción de la verticalidad tenían dificultades a la hora de resolver problemas relacionados con representaciones simbólicas en los que la solución depende de que se tome un elemento fuera del contexto en el que se presenta para utilizarlo en un contexto diferente (Glucksberg, 1956; cit. en Witkin y Goodenough, 1981). Se concluye que la aptitud para desenmascarar es un fenómeno que no se limitaba al funcionamiento perceptual, sino que trasciende al funcionamiento intelectual.
Sobre el segundo tema, la relación entre la aptitud para desenmascarar y la aptitud para estructurar, los estudios indicaron que en ausencia de organización evidente y clara, las personas independientes de campo imponían una estructura dada al campo estimular, mientras que las personas dependientes de campo mostraban la tendencia a dejar el material tal y como había sido presentado (Witkin y cols., 1962).
Estos resultados dieron lugar al constructo de “articulación de campo” que incluye tanto la dependencia-independencia como la aptitud para desenmascarar y reestructurar la información. Así, ahora se diferenciaban sujetos que detentaban un “enfoque articulado” de aquellos que mostraban un “enfoque global”. Los primeros experimentan los elementos como separados de sus contornos y muestran la tendencia a imponer una estructura a un campo estimular cuando ésta no es clara; los segundos, por el contrario, experimentan los elementos integrados en sus entornos y no muestran una tendencia a estructurar campos con organizaciones poco claras.
Impulsividad/Reflexividad
En las situaciones de incertidumbre o ambigüedad el individuo debe elegir entre actuar, aunque cometa errores, o sólo dar los pasos que considere y evalúe como correctos, minimizando los errores
La impulsividad- reflexividad, por tanto, se refiere a la tendencia a inhibir las respuestas iniciales y a reparar en ellas con el fin de evaluar su grado de precisión.
Los impulsivos muestran menos ansiedad por cometer errores y orientación hacia el éxito rápido, más que a evitar el fracaso, tienen bajos estándares de rendimiento y menor motivación por tareas que implican aprender.
Para evaluar este estilo cognitivo se usa la prueba de emparejamiento de figuras familiares (MFF)
Visualizador/verbalizador.
Este estilo cognitivo hace referencia a la manera en que un individuo atiende y procesa la información. Así, alguien visualizador se basa sobre todo en la información que le llega por el canal visual, mientras que alguien verbalizador lo hará por las palabras leídas o escuchadas para procesar la información.
Las aptitudes cognitivas utilizadas serían diferentes: los visualizadores utilizan la memoria viso-espacial y los verbalizadores la comprensión o la clasificación verbales.
Visual/háptico
Es un estilo similar al visualizador/verbalizador, diferenciándose por un procesamiento de la información visual o táctil (háptico).
Aunque los individuos de todas las edades difieren, desde la psicología evolutiva se ha hablado de diferencias, mostrando los adultos una mayor preferencia por el estilo visual y los niños por el háptico.
El estilo conceptual.Los individuos diferimos en la estrategia para categorizar conceptualmente los objetos. Así podemos encontrar personas analíticas (o analítico-descriptivas), que centran su atención en los elementos de los objetos y agrupan estos sobre la base de los elementos comunes; relacionales que se fijan más en los objetos globales y los agrupan con el criterio de las relaciones funcionales.
Locus de control interno/externoEs el grado en que un sujeto percibe que el origen de los eventos, conductas y de su propio comportamiento es interno o externo a él.
Las personas con locus de control interno perciben los acontecimientos como resultado de sus propias acciones. Valoran positivamente el esfuerzo, la habilidad y la responsabilidad.
Las personas con locus de control externo perciben los acontecimientos como resultado del azar, destino, o el poder y decisiones de otros.

Enlace powerpoint

Fuentes consultadas:• Davidoff, L.L. (1989): Introducción a la psicología, México, McGraw-Hill.
• Fierro, A. (2002): Personalidad, persona, acción. Un tratado de psicología, Madrid, Alianza Editorial.
• http://es.wikipedia.org/wiki/Impulsividad
• http://es.wikipedia.org/wiki/Estilo_cognitivo
• http://espanol.geocities.com/aguilera99/volumen43.htm#ESTILOS COGNITIVOS, DESARROLLO OPERATORIO Y PRECONCEPCIONES

sábado, 10 de octubre de 2009

Análisis Transaccional





La Asociación Internacional de Análisis Transaccional (ITAA) define al Análisis Transaccional como una teoría psicológica y social, basada en contratos de cambio para crecimiento y cambio personal.
En general, el Análisis Transaccional es un sistema de psicoterapia individual y social que se engloba dentro de la psicología humanista.

Los Orígenes:
El Dr. Eric Berne (1910-1970), médico psiquiatra, fue el fundador del Análisis Transaccional. Elaboró su modelo a partir de sus observaciones en la psicoterapia de grupo a principios de los años cincuenta. En su elaboración reconoce la influencia de sus maestros Paul Federn y Erik Erikson, con quienes se psicoanalizó. Se rodeó de un equipo de colegas y organizó regularmente unos seminarios en San Francisco, California, para compartir sus experiencias como terapeutas de grupo y con vistas a desarrollar un modelo de "psiquiatría social" basada en el estudio de las interacciones entre las personas, que llamó Análisis Transaccional.

Filosofía y principios del Análisis Transaccional:
La filosofía del Análisis Transaccional, basada en la filosofía humanista, parte del principio de que “todos nacemos bien”. Berne decía metafóricamente “todos nacemos príncipes y princesas”. Después en nuestras relaciones con los demás tomamos decisiones autolimitadoras con las que nos convertimos en “sapos o ranas encantadas”.

El segundo principio en que se basa el AT es que todos tenemos un cierto potencial humano (determinado por los condicionamientos genéticos, circunstanciales, de salud, y sociales), que podemos desarrollar.
Las limitaciones externas al desarrollo de nuestro potencial humano, y sobre todo las limitaciones internas decididas tempranamente, producen la infelicidad, la auto-limitación de las habilidades personales para resolver problemas y enfrentarnos a la vida y en definitiva la patología. De modo que yo soy responsable de mi vida y decido lo que es bueno para mí.

El tercer principio en que basa su filosofía el A.T. es que todos podemos cambiar en pos de la autonomía y tenemos los recursos necesarios para hacerlo. Estos recursos pueden ser personales o relacionales e incluyen la posibilidad de tomar nuevas decisiones más autopotenciadoras.
Entre los valores que sostiene la filosofía del Análisis Transaccional existe el principio de “Yo estoy bien y Tú estas bien”, postura de respeto por la individualidad y valor de cada persona que promueve un trato de equidad entre las mismas, respetando sus diferencias por sexo, raza, cultura, orientación sexual y condición social o económica.

Las metas del Análisis Transaccional:
La meta del Análisis Transaccional es que las personas alcancen su autonomía, lo que se puede lograr a través de la recuperación de nuestras capacidades de:
- consciencia o capacidad de distinguir la realidad de la fantasía interna proyectada sobre lo que me pasa o lo que sucede.
- espontaneidad o capacidad de expresar mis propios pensamientos, sentimientos y necesidades y de actuar en consecuencia.
- intimidad o capacidad de abrirme al otro, estar próximo y actuar con reciprocidad.
El Análisis Transaccional es un modelo decisional de la personalidad que permite:
- Comprender cómo interactuamos, qué buscamos en nuestras relaciones y cuáles son nuestras raíces ocultas que nos hacen reaccionar de manera repetitiva.
- Sentir y tomar conciencia de qué es lo que pasa en nosotros; qué necesitamos; qué deseamos y cuales son nuestras metas.
- Actuar y tomar la iniciativa para poner en marcha los cambios personales, relacionales u organizacionales.

Principios de aplicación del Análisis Transaccional:
• La practica profesional ha de partir de una comunicación clara, directa y pertinente entre terapeuta-paciente.
• Propone la existencia en cada uno de nosotros de tres estados del yo: Padre, Adulto y Niño, y plantea como meta de crecimiento la consciencia e integración de los mismos.
• La utilización de contratos de cambio que permitan crear objetivos claros y alcanzables, solucionar problemas y evaluar los resultados.
• El manejo consciente de las transacciones (comunicación) y las caricias (estímulos) como elementos fundamentales de la motivación humana.
• La comprensión y utilización de instrumentos tales como: la estructuración del tiempo, los juegos psicológicos y los guiones de vida entre muchos otros más que permiten vivir con mayor consciencia, desarrollo y auto-realización.

Instrumentos utilizados en el A.T
• Esquema de la Personalidad, Análisis Estructural y Funcional (egograma)
• El análisis de las transacciones.
• Estímulos sociales o caricias.
• Las posiciones existenciales: diagrama de posiciones existenciales.
• La estructuración del tiempo.
• Emociones auténticas y sustituciones (emociograma)
• Juegos psicológicos (Diagrama transaccional; La fórmula de Berne; El triángulo dramático).
• Argumento y metas de la vida.
• Miniargumento.
• Dinámica de grupos.

Los campos de aplicación:
El Análisis Transaccional se utiliza principalmente en:
- Psicoterapia: individual, de pareja, de familia, en grupo.
- Orientación: personal, familiar, relacional, vocacional, etc.
- Empresa y organizaciones: consultoría, desarrollo organizacional, cultura organizacional, trabajo en equipo, dirección de personas, comunicación, etc.
- Trabajo social: exploración de recursos, apoyo y orientación social, integración y marginación, reinserción social, etc.
- Relación de ayuda: asistencial, clínica, familiar, voluntariados, etc.
- Pedagogía: educación, reeducación, orientación e integración escolar, desarrollo humano, etc.
- Formación: de padres, profesores, educadores, profesionales, vendedores, consumidores, amas de casa, adolescentes, parejas, dirigentes, etc.


Fuentes consultadas
• http://cesgrafo.blogspot.com/2008/10/el-anlisis-transaccional.html
• http://psicologiaholistica.tripod.com/id14.html
• http://www.imat.com.mx/?s=at